Durante finales del mes de junio, el Centro Nacional de la Propiedad Forestal (CNPF) desarrolló 3 jornadas informativas enfocadas a propietarios forestales y empresas y administraciones de los sectores difusos, para dar a conocer el proyecto LIFE FOREST CO2, así como las mejores técnicas para secuestrar carbono enfocado a empresas y autoridades y grupos locales. El objetivo es dar difusión los trabajos que se pueden financiar a nivel local en Francia baja compensación de la huella de carbono en relación a un futuro registro de certificación nacional de carbono, a través de casos de éxito de selvicultura enfocada al secuestro de carbono, con el fin último de incentivar a los propietarios forestales a desarrollar proyectos de absorción de CO2.

El CNPF propone visitas de parcelas de bosques a las empresas y administraciones públicas aquitanas. Sauveterre-de-Guyenne

La primera sesión tuvo lugar el 26 de junio en Sauveterre-de-Guyenne (Gironde, Nouvelle Aquitaine), donde el CNPF presentó a las empresas y administraciones públicas tres parcelas:

  • Una parcela de monte bajo de castaño con gran mortalidad. La solución consiste en hacer una repoblación con una especie más adecuada a la estación (probablemente con roble).
  • Una parcela de monte bajo de roble con una potencialidad interesante. Hay que clarear para secuestrar mejor el carbono en lugar de hacer talas arrasadas cada 20 o 30 años.
  • Una parcela de un antiguo monte bajo de roble, en el que se practicó una conversión en un monte alto (foto adjunta a cotninuación). Este tratamiento selvícola, además de un secuestro de carbono más importante, permite una mejor valorización de la madera mediante un aumento de la producción de madera de calidad.

 

Antiguo monte bajo de roble convertido en un monte alto. El CNPF anima a los propietarios forestales a hacer este tipo de tratamiento silvícola para secuestrar más carbono.

El Jueves 29 de junio, la jornada se realizó en Saint-Jory (Tarn-et-Garonne, Occitanie), donde se mostraron diversos ejemplos de repoblaciones en un bosque aluvial (a las orillas del río Garona) a los participantes: arce sicómoro, nogal, cedro, robinia y pino. Las empresas y las administraciones públicas pudieron darse cuenta de que todas las elecciones de especies no tuvieron éxito. En este caso concreto el propietario quiere repoblar algunas zonas pero los costes demasiado caros son prohibitivos, sin tener en cuenta las inversiones previas. Estas parcelas podrían ser propicias para potenciales proyectos de absorción, a la atención de entidades interesadas en compensar su huella de carbono.

Población de arce sicómoro talado, 20 años

Población de cedro, 20 años

Población de robinia de 6 años con un crecimiento rápido

Esta serie de visitas finalizó el 6 de julio en Saint-Bauzille-de-Montmel (Hérault, Occitanie). Durante este verano, los incendios han destruido millares de hectáreas de bosques mediterráneos. A los alrededores de Montpellier, el pino carrasco (Pinus halepensis) es una especie omnipresente, con un potencial de propagación de incendios. El CNPF presentó por qué una silvicultura de prevención puede posicionarse como un medio de lucha contra los incendios en la medida que los bosques son gestionados con claras que disminuyen la biomasa combustible. En la masa visitada, ¡la ocurrencia de tales incendios es importante con 3 incendios en 26 años (1989, 2003 y 2015)! Las empresas y administraciones públicas de la región de Montpellier podrían implicarse en esa problemática mayor mediante la compensación de la huella de carbono, participando en proyectos de disminución del riesgo de incendios.

Masa a proximidad inmediata de una carretera con una fuerte clara y un desbrozo

Masa de pino carrasco clarada por ambas partes de un sendero

Masa de pino carrasco integralmente clarada

El CNPF organizará otros encuentros a partir del otoño por Limoges, Pau y Lyon. Para más información, contactar CON Lucie Rupil (l.rupil@crpfaquitaine.fr), Raphaël Bec (raphael.bec@cnpf.fr) u Olivier Gleizes (olivier.gleizes@cnpf.fr).